Junto con Brujas y Amberes, Gante es una de las tres maravillas de Flandes; pese a reducido, su casco histórico alberga numerosos y singulares atractivos para conocer caminando o andando en bici, y en el que el olor a chocolate, se funde con cerveza, torres y mucha historia. En pocas palabras, una ciudad que lo tiene todo para disfrutarla de día y tomarse el tiempo de al menos pasar una noche caer sobre ella, de ahí lo recomendable de encontrar un buen lugar donde dormir en Gante.
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Gante, explosión de cultura e historia en Bélgica:
Son muchos los acontecimientos que han marcado la historia de Europa en los últimos siglos, altibajos y eventos transcendentales que dejaron huella en la arquitectura y fisonomía de múltiples ciudades; prueba latente de ello son las empedradas calles de Gante, una urbe marcada por el glorioso periodo de prosperidad en la Edad Media y los estremecidos primeros pasos de la revolución industrial.
Como si no fuese suficiente, su cultura e historia son igualmente resultado del aporte de una de las comunidades de universitarios y Erasmus más grandes de Europa, lo que da lugar a una ciudad difícil de pasar desapercibida, pese a estar a la sombra de las grandes metrópolis turísticas de Bélgica. Lo compacto de su tamaño, le confiere un toque más acogedor, ambiente perfecto para descubrir sus secretos caminando o en bicicleta.
¿Dónde alojarse en Gante?
Debido a lo agitado del ritmo de vida universitario propio de la ciudad, al que se le suma el agite que provocan los turistas que sucumben a sus encantos, encontrar donde dormir en Gante no será inconveniente ¡ofertas de alojamiento sobran! Y no solo eso, sino que se consiguen precios y tipos de habitaciones para todos los gustos, necesidades y presupuestos.
Si de recomendaciones se trata, el mejor lugar donde alojarse en Gante sin duda corresponde al casco histórico de la ciudad. La razón de ello es simple, congrega prácticamente lo más destacado de sus atractivos turísticos, sin descartar que un paseo nocturno con sus principales puntos iluminados, sea un espectáculo que nadie debería perderse.
Hoteles como De Flandre y Hotel Harmony, merecen ser incluidos en la lista de posibilidades, debido a su singular belleza y estratégica ubicación al permitir el acceso a lugares de interés únicamente con unos minutos de caminata. Se emplazan muy cerca del icónico Puente de San miguel y en sus áreas colindantes, se concentra buena parte de los sitios para comer y pasar el rato.
¿Qué comer en Gante?
Tocando el tema de la cocina, cabe enfatizar la forma en la que ha evolucionado la gastronomía flamenca durante los últimos años, volviéndose cada vez más prestigiosa en el continente entero. Por antonomasia, la cerveza y el chocolate, son los productos que le han hecho sobresalir – sería un error dejar de probarlos – sin embargo, a día de hoy, el arte culinario se expande pisando nuevos terrenos que apuestan por la creatividad con platos de gama alta y cero kilometrajes. Aunque comprobar esto es posible en la mayoría de sus restaurantes y establecimientos locales, no está demás echarse una paseadita por el Café Theatre o el restaurant Pakhuis por ser lugares céntricos en los que se sirven deliciosas e innovadoras recetas.
De manera que tras encontrar donde alojarse en Gante, la recomendación es irse directamente a probar suculentos platos, siendo el estofado de ternera flamenca a la cerveza uno de los imperdibles; claro que si se trata de recetas emblemáticas, es un error dejar de pedir el waterzooi – guiso de pollo o pescado de río – y los tradicionales cuberdons, dejando siempre un espacio para los mastel, deliciosos bollitos de canela que despiertan las ganas de repetir.
Hasta 300 referencias esperan en las cartas de las catedrales de la cerveza en Gante, de ahí lo casi obligatorio de llegarse hasta De Dulle Griet y Waterhuis aan de bierkant; una interesante curiosidad del lugar es que debe dejarse un zapato dentro de una al pedir una Kwak, que solo será devuelto una vez que se retorne el vaso vacío. Al salir, la siguiente escala en el recorrido conduce directo a Tierenteyn, la hermosa tiendecita ideal para los amantes de la mostaza.
¿Cuántos días se necesitan para disfrutar Gante?
Suponiendo que lo que se siga es una ruta por Flandes, lo idóneo es tomarse al menos un par de días luego de encontrar donde dormir en Gante; el inconveniente es que cabe la posibilidad de quedar tan enamorado de la ciudad como para no querer dejarla tan rápido, ya que es de esas locaciones que dejan con ganas de mucho más.
Tantos atractivos enmarcados en una belleza singular, demandan una visita con calma; de manera que si se está planificando la visita, conviene considerarle como un delicioso bombón perfecto para degustar poco a poco en la boca.
