Los trastornos alimenticios son un problema que afecta a niños en todo el mundo. Cuando los padres sospechan que su hijo podría tener un trastorno alimenticio, es fundamental que se informen sobre los síntomas. Este artículo explora ¿Cuáles son los síntomas de los trastornos alimenticios en niños?
y qué pueden hacer los padres para ayudar a sus hijos.
1. ¿Qué son los trastornos alimenticios y cómo afectan a los niños?
Los trastornos alimenticios son trastornos directamente relacionados con la alimentación, que además de poner en riesgo la salud física, también afectan a la salud mental y emocional. Estas enfermedades incluyen desordenes como la anorexia, bulimia, trastorno por atracón, trastorno por evitación de alimentos y trastorno alimenticio no especificado.
Estos trastornos pueden tener complicaciones graves para los niños, afectando desde su desarrollo intelectual hasta su autoestima.
Los niños con trastornos alimenticios pueden presentar déficit nutricionales, disminución de peso, fatiga, fragilidad ósea, infecciones respiratorias, insomnio y retraso de desarrollo.
El tratamiento para los trastornos alimenticios es únicamente bajo supervisión médica, y suele incluir los siguientes componentes:
- Aconsejar y orientar al paciente.
- Acompañar y apoyar al paciente y su familia durante el proceso.
- Brindar ayuda psicológica para manejar los factores emocionales del trastorno.
- Lograr que el paciente mantenga un peso saludable por medio de una alimentación adecuada.
Los trastornos alimenticios pueden ser identificados en los niños por algunas señales como rechazo a algunos alimentos, necesidad de contar calorías, sentir constante preocupación por controlar el peso, entre otras. Si un niño presenta alguno de estos síntomas, lo mejor es acudir a un especialista para recibir el tratamiento adecuado.
2. Signos y síntomas típicos de los trastornos alimenticios en niños
1. Trastornos del comportamiento alimentario infantil
Los trastornos del comportamiento alimentario infantil son trastornos caracterizados por un patrón de alimentación anormal y de comportamientamento relacionado con alimentos, que causan problemas psicológicos y físicos significativos. Estos trastornos afectan tanto a niños como a adolescentes. Los signos más comunes en los niños pequeños son la resistencia a comer, los patrones alimentarios selectivos y el rechazo a los alimentos nuevos. Los trastornos del comportamiento alimentario generalmente empeoran con el tiempo si no se tratan adecuadamente.
2. Anorexia nerviosa en niños
La anorexia nerviosa es un trastorno de la alimentación que se caracteriza por la preocupación excesiva por la comida y el peso y la búsqueda de un peso con peso bajo. Los niños y adolescentes afectados por la anorexia pueden tener problemas psicológicos, trastornos físicos y sociales. Los signos y síntomas típicos includen la falta de apetito, un lento crecimiento o una pérdida de peso significativa, la preocupación excesiva por el peso y la talla, el rechazo a los alimentos, el miedo excesivo a engordar, el comportamiento alimentario anormal y los trastornos del sueño.
3. Bulimia en niños
La bulimia es un trastorno alimentario caracterizado por el consumo excesivo de alimentos seguido de vómitos para evitar el aumento de peso. Los niños y adolescentes con bulimia pueden mostrar signos y síntomas como el consumo excesivo de alimentos en breves periodos de tiempo, el uso de laxantes o diuréticos, el ayuno excesivo o el abuso de ejercicio para prevenir el aumento de peso, y pueden tener un interés excesivo en su peso y su figura.
4. Trastorno de atracón en niños
El trastorno de atracón es un trastorno alimentario caracterizado por episodios recurrentes de ingesta excesiva de comida. Los atracones a menudo comienzan como episodios de comer en exceso y aumentan cuando la comida se consume con rapidez. Los niños y adolescentes con trastorno de atracón pueden tener episodios de comer en exceso o atracones recurrentes, sentir cómo si no pudieran controlar la cantidad de comida que están comiendo o sentirse culpables o disgustados después de un episodio.
3. ¿Cómo reconocer los primeros signos tempranos de los trastornos alimenticios en niños?
1. Observar Si Los Hábitos Alimenticios Del Niño Cambian De Repente
Es común que los niños no prefieran los alimentos saludables o que se les haga difícil comer en ocasiones. Sin embargo, si suceden cambios bruscos y el niño deja de comer los alimentos saludables y solo quiere comer uno o dos alimentos, entonces es posible que estén muy relacionados a un trastorno alimenticio. Además, los padres también podrían notar que su hijo se alimenta de forma excesiva hasta el punto de no tener hambre por ratos largos luego de las comidas, esto es debido a la ansiedad.
2. Observar El Desarrollo Corporal Del Niño
Los niños con trastornos alimenticios pueden estar bajo o sobrepeso rápidamente, así como también a nivel hormonal puede evidenciar un cambio. Esto se debe a que el cuerpo se nutra de los nutrientes para sus funciones básicas y cuando los alimentos llegan en una menor cantidad, no llega la cantidad de energía para realizarlas.
3. Análisis Psicológico
Los padres pueden observar los cambios en el comportamiento y actitudes del niño, pues los trastornos alimenticios se relacionan con la esencia emocional. Los trastornos alimenticios implican muchas emociones o sensaciones negativas y como consecuencia influyen en el comportamiento y la personalidad del niño.
4. Consultar Al Médico
Si los padres detectan estos cambios o algunos signos más avanzados en el hijo, es importante que acudan a consulta con un médico. El médico puede realizar la técnica anamnesis para recabar información sobre los síntomas que presenta el niño, además le puede recomendar un tratamiento ajustado para su caso.
4. Factores de riesgo de desarrollar trastornos alimenticios en los niños
Los trastornos alimenticios en los niños son problemas de salud que hay que tratar con mucha seriedad. Debido al estrés cada vez mayor al que están expuestos los niños, existen ciertos factores de riesgo que hay que tener en cuenta. Estos incluyen:
- Cambios bruscos en los patrones dietéticos. Esto puede ocurrir cuando los niños tienen una dieta extremadamente restringida que les impide consumir alimentos saludables o algunos alimentos en particular.
- Inestabilidad emocional. Los niños inestables emocionalmente pueden tener problemas para regular sus patrones alimenticios.
- Ciclos de abuso. Los niños que viven en un ambiente de abuso psicológico o físico pueden desarrollar trastornos alimenticios como una forma de procesar el estrés.
- Amenazas al desarrollo normal. Esto se refiere al hecho de que algunos niños experimentan presión excesiva para alcanzar ciertos estándares o lograr ciertos niveles de rendimiento que tienen un impacto negativo en su desarrollo normal.
La presión social también puede jugar un papel importante. El bullying, la obsesión por la imagen corporal y la preocupación por la presión de los compañeros de clase pueden contribuir al desarrollo de trastornos alimenticios en los niños. Las familias también pueden influir especialmente en el desarrollo de los trastornos alimenticios cuando hay sobrecargas familiares que afectan la capacidad de los niños para procesar sus emociones. La presión laboral excesiva de los padres también puede contribuir a la inestabilidad emocional de los niños.
Además, los padres deben tener mucho cuidado al exponer a los niños a la influencia de los medios. Los programas de televisión, las publicaciones y las redes sociales a menudo promueven la obsesión por la delgadez, lo que puede propagar estereotipos irrealistas de la belleza y alimentar el problema. Los padres deben trabajar para asegurarse de que los niños tengan una idea saludable de su cuerpo y puedan identificar la influencia negativa de los medios.
Los padres, los maestros y los profesionales de la salud deben estar atentos a los signos de alerta de trastornos alimenticios. Estos signos incluyen cambios repentinos en el apetito, el estado de ánimo inestable, la compra excesiva de alimentos, el rechazo a comer en público, el ocultamiento de los alimentos y la pérdida de peso excesiva. Si un niño presenta alguno de estos signos, los padres deben buscar ayuda profesional.
5. Evaluación de los trastornos alimenticios en niños
Definición y análisis clínico. Al evaluar a un niño con trastornos alimenticios, es importante que el profesional provea un análisis clínico. Esto implica una comprensión del trastorno, independientemente de la etiología que existe detrás de los síntomas. La primera parte de esta evaluación es la definición de la afectación presente: si está relacionada a la ingesta, el peso o la imagen corporal. Luego es necesario, a través de una recolección de información médica, un examen físico, una exploración psicoanalítica y un cuestionario, definir el tipo de trastorno alimenticio de acuerdo a las restricciones, rumiaciones o atracones realizados como consecuencia del mismo.
Observación de la conducta alimentaria. Luego de realizar el análisis clínico, el profesional deberá llevar a cabo una evaluación pura y simple de la conducta alimentaria del paciente. Esto implica contar y realizar un registro de los días en que no hay ingesta, las cantidades ingeridas y su frecuencia. Para esto, el profesional puede llevar un diario alimenticio o recurrir al uso de preguntas específicas para evaluar el patrón de alimentación del paciente.
Evaluación de los síntomas. Una buena debe incluir la evaluación de síntomas a nivel físico y emocional que tradicionalmente se asocian con estos trastornos, como son:
- Niveles bajos de energía y fatiga.
- Ansiedad y depresión.
- Disminución de la autoestima.
- Estreñimiento o diarreas frecuentes.
Inventario sensorial. Por último, se recomienda a los profesionales para la realizar un inventario sensorial. Esta herramienta brinda información esencial para determinar el nivel de afectación de los sentidos del paciente en relación a los alimentos. Los resultados de este inventario servirán de base para encontrar estrategias que incrementen la tolerancia al mismo.
6. Cómo ayudar a los niños que padecen trastornos alimenticios
1. Comprender los trastornos alimenticios
Los trastornos alimenticios afectan a cada vez más niños y adolescentes de todo el mundo. Estos pueden ser trastornos específicos como la bulimia nerviosa, la anorexia nerviosa o la disfagia. Es importante destacar que estas enfermedades son las más comunes entre los niños, pero no son las únicas. Es importante conocer todas las posibles ramificaciones de los trastornos alimenticios en la vida de un niño.
Es importante comprender los signos y síntomas de los trastornos alimenticios para poder ayudar a los niños que la padecen. Se recomienda leer materiales científicos para obtener una comprensión profunda de la afección o hablar con un profesional de la salud mental para obtener información adecuada.
2. Prevención
La prevención es siempre mejor que la curación, por lo que es importante promover cambios en el estilo de vida de los niños para prevenir los trastornos alimenticios. Una buena nutrición junto con actividad física, descanso adecuado y establecer límites saludables para la alimentación ayudarán al niño a evitar los trastornos alimenticios.
Los padres necesitan estar atentos a los comportamientos alimenticios extraños en sus hijos y tratar de abordarlos para prevenir estos trastornos. Las actividades de educación alimenticia son útiles para promover la prevención de los trastornos alimenticios entre los niños.
3. Tratamiento
Existen diferentes tratamientos para los trastornos alimenticios entre los niños. Estos incluyen terapia, medicamentos, nutrición y apoyo psicosocial. Los tratamientos médicos y psicológicos juntos son mucho más efectivos que las terapias individuales.
Es importante hablar con el profesional de la salud para determinar el mejor tratamiento para el niño. El tratamiento debe ser individualizado para satisfacer las necesidades específicas del paciente y abordar los síntomas. El equipo de tratamiento también puede incluir un psicólogo, un terapeuta y un nutricionista para ayudar al niño a recuperarse de la enfermedad.
4. Apoyo durante el recuerdo
Los niños con trastornos alimenticios necesitan el apoyo de su familia y amigos para poder superar esta condición. Los padres deben estar ahí para aprender a comprender a los niños, permitirles hablar sobre sus miedos y ayudarles a construir un ambiente seguro. Es importante destacar que es necesario estar informado sobre los trastornos alimenticios para poder ayudar mejor al niño.
Los amigos y compañeros de clase también pueden ayudar brindando apoyo emocional a los niños que padecen estos trastornos. La mejor forma de ayudar es generar un ambiente libre de juicios y establecer buenas relaciones con los niños. Si sospechamos de un trastorno alimentario en un niño, es importante obtener ayuda médica lo antes posible.
7. Tratamiento efectivo para los trastornos alimenticios en niños
En su mayor parte, los trastornos alimenticios en los niños se pueden tratar con éxito con la ayuda de tratamientos médicos, psicológicos y nutricionales. La terapia es una parte importante del tratamiento, en la que los niños son preparados para aumentar la confianza en sí mismos y cambiar sus comportamientos alimenticios. Además de la terapia, muchos niños son tratados con medicamentos. Esto puede ayudar a los niños a manejar la ansiedad, los trastornos del humor y cualquier síntomas relacionados con el comportamiento alimenticio.
Consejos para ayudar a los niños con trastorno alimenticio
Introduzca poco a poco alimentos saludables y variados: Los niños con trastornos alimenticios a menudo se encuentran en un peso bajo ideal, por lo que sus padres deben tratar de introducir una variedad de alimentos saludables en sus dietas. Esto ayudará a sus cuerpos a volver a la nutrición adecuada, que es el objetivo principal del tratamiento. Los padres también deben tratar de dar a sus hijos alimentos con alto contenido calórico y nutritivo para apoyar una buena salud en general y ayudar a su peso a volver a los niveles normales.
Evite hablar sobre comidas y dietas: Existe una gran cantidad de conversaciones relacionadas con las comidas en cualquier familia, como si el niño está comiendo un alimento saludable, si son alergias a ciertos alimentos, etc. Estas conversaciones son necesarias, pero los padres no deben abrumar al niño con ellas. Esto puede agravar el sentimiento de ansiedad que el niño siente alrededor de las comidas y es mejor evitar cualquier tipo de discusión sobre las comidas.
Otras estrategias de tratamiento
- Talleres base acerca del comportamiento alimentario
- Ejercicio físico con el objetivo de aumentar el apetito
- Estrategias de reducción de estrés y habilidades de afrontamiento
- Educación de los padres acerca de cómo reconocer los signos de los trastornos alimenticios
- Intervención en el aula para comprender los cambios en el comportamiento alimenticio a un nivel grupal
La colaboración familia-terapeuta es un elemento esencial del tratamiento exitoso de los trastornos alimenticios en niños: Los padres, junto con los profesionales del tratamiento, pueden ayudar al niño a establecer y mantener hábitos alimenticios saludables. Los padres deben trabajar con los profesionales para ayudar al niño a comprender su problema y a desarrollar habilidades para superar su trastorno alimenticio.
8. La importancia de la prevención de los trastornos alimenticios en niños
Los trastornos alimenticios son disturbios serios que pueden afectar a los niños en su desarrollo. Si bien los trastornos alimenticios como la bulimia o la anorexia pueden empezar en la adultez, los niños pueden ser fácilmente influenciados por compañeros y medios de comunicación. Por lo tanto, es importante educar a los niños sobre estos trastornos alimenticios para prevenirlos. Aquí están algunas maneras de prevenir los trastornos alimenticios en los niños.
Tener buenas charlas con los niños
Los padres e incluso los maestros deben tener buenas charlas con los niños acerca de los alimentos y los trastornos alimenticios. Estas charlas deben ser directas, en lenguaje apropiado para la edad de los niños y no tienen que percibirse como una lectura moral. Durante estas conversaciones, es importante explicarle a los niños los beneficios de seguir una dieta saludable y las consecuencias negativas de los trastornos alimenticios. Además, los padres deben animar a los niños a disfrutar de todos los alimentos de forma saludable, en lugar de centrarse sólo en seguir dietas estrictas.
Enseñarles a los niños habilidades de autocontrol
Los padres deben ayudar a los niños a aprender habilidades de autocontrol para evitar el exceso de comer o comer en exceso. Estas habilidades de auto-control también pueden ayudarlos a aprender a identificar emociones como ansiedad o estrés y a manejarlas sin recurrir a la alimentación. Una buena manera de enseñar estas habilidades a los niños es promover un estilo de vida saludable con una buena alimentación y suficiente ejercicio.
Educar a los niños acerca de los medios de comunicación
Muchas veces, la presión de los medios de comunicación puede contribuir a la aparición de los trastornos alimenticios en los niños. Por ello, es importante que los padres expliquen cómo los medios de comunicación pueden influir en los sentimientos de los niños y cómo pueden apoyarlos para evitar esa presión. Los padres también deben explicar a los niños los conceptos de belleza y salud, mostrándoles ejemplos positivos de medios de comunicación que promueven la autenticidad.
Es importante señalar que los trastornos alimenticios en niños no deben ser pasados por alto como simples caprichos temporales. Los padres deben mantener una vigilancia cuidadosa de los comportamientos y hábitos alimenticios de los niños para ayudarlos a obtener una nutrición óptima, evitar la ansiedad y prevenir problemas de salud futuros. Entender los síntomas de los trastornos alimenticios en los niños es un paso importante para resolver el problema a tiempo y asegurarse de que los niños reciban el tratamiento médico que necesitan.